El Presidente de la Junta General ostenta la máxima representación de la Cámara. Es elegido por el Pleno de entre sus miembros en la sesión constitutiva, requiriéndose mayoría absoluta en primera votación y, de no obtenerla, mayoría relativa en las siguientes.
Asegura la buena marcha de los trabajos del Parlamento y fija, de acuerdo con la Junta de Portavoces, el orden del día de las sesiones del Pleno.
Preside la Mesa, la Junta de Portavoces, la Comisión de Reglamento, la Diputación Permanente y el Pleno de la Cámara.
Dirige los debates y mantiene el orden en ellos, interpretando el Reglamento y supliéndolo si tuviera omisiones.
Vela por el mantenimiento del orden en el recinto parlamentario y en todas sus dependencias.
Junto con el resto de la Mesa dirige el gobierno interior del la Cámara.
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