Participación
Conferencia de Espacio Fundamentos sobre la inteligencia artificial
16-09-2024
General
Espacio Fundamentos
La Junta General ha acogido esta tarde la conferencia programada por Espacio Fundamentos que, bajo el título "Gobernar la inteligencia artificial, gobernar con inteligencia artificial", han impartido Anne Meuwese, Catedrática de Derecho Público y Gobernanza de la Inteligencia Artificial de la Universidad de Leiden (Países Bajos), y Alejandro Huergo, Catedrático de Derecho Administrativo en la Universidad de Oviedo.
Al acto de Espacio Fundamentos, el foro de reflexión promovido por el Parlamento asturiano y la Universidad de Oviedo, han asistido diputadas y diputados del Parlamento asturiano. También ha estado presente, entre otras autoridades, el rector de la Universidad de Oviedo, en un acto que ha contado con la intervención del presidente de la Junta General. Juan Cofiño ha confesado que se siente una "víctima generacional" de "un intenso cambio tecnológico en el que la inteligencia artificial (IA) representa el arquetipo de nuestro tiempo".
Juan Cofiño ha reflexionado sobre la necesidad de afrontar "como consumidores acríticos" esta nueva realidad tecnológica que, en su opinión, genera "algún riesgo inherente", entre ellos "la afectación al más sagrado de nuestros derechos: la libertad". En este sentido, considera que "en el plano colectivo puede afirmarse que está en riesgo nuestra democracia", motivo por el que cree que "el desasosiego y la preocupación están más que justificadas".
Imagen de la intervención del presidente de la Junta en la conferencia celebrada en el Salón Europa. Foto: Nacho Vela.
Para el presidente del Parlamento asturiano, "la regulación y el control, en sentido amplio, de esta complejísima materia, por parte de los poderes públicos, constituye la clave de bóveda para la tranquilidad de todos nosotros". Juan Cofiño llama a "reflexionar para adoptar decisiones que nos hagan inmunes a sus evidentes riesgos" y propone "una llamada de gran intensidad al mundo del derecho, toda vez que disciplinar y someter a control esta tecnología emergente, implica dotarnos de normas reguladoras al respecto.
Leonardo Álvarez, coordinador de Espacio Fundamentos, tras presentar a los juristas conferenciantes, ha dado la palabra a Anne Meuwese, quien ha destacado que, con la implantación de ChapGPT, el chat basado en un lenguaje por inteligencia artificial, se ha popularizado esta tecnología.
La catedrática se ha referido a la necesidad de un desarrollo responsable de la inteligencia artificial y a la conveniencia de su regulación, que "es difícil porque el rápido avance tecnológico hace que las leyes normativas se queden obsoletas rápidamente ya que la IA avanza más rápido que las normas reguladoras". Los impactos de la IA, ha añadido, "son poco predecibles, lo que complica su regulación efectiva". No obstante, ha informado que ya hay un reglamento regulatorio europeo, "pero hay un plazo de dos años para la aplicación de la mayoría de las normas" y que la Comisión Europea trabaja en un código de buenas prácticas, "que espera finalizar en la primavera de 2025".
Anne Meuwese, en un momento de su intervención. Foto: Nacho Vela.
Anne Meuwese, que ha hecho asimismo mención al trabajo sobre la materia que realiza el Consejo de Europa, ha subrayado que "las grandes tecnológicas suelen venir de EEUU y, las normas, de Europa ", lo que implica que "los gigantes tecnológicos han estado presionando intensamente a los legisladores europeos pidiendo no incluir modelos como el ChapGPT en la categoría de riesgo alto, un lobby que ha sido bastante exitoso". La UE, a su juicio, "ha ganado, de momento, la carrera reguladora sobre la inteligencia artificial porque es la primera en tener una norma integral sobre el uso de esta inteligencia, pero para funcionar como estándar mundial necesitará la ayuda del Consejo de Europa".
Alejandro Huergo, por su parte, ha advertido de que "los Gobiernos y las instituciones legislativas son unos recién llegados a este mundo, que intentan regular la inteligencia artificial y los Gobiernos también se plantean su utilización".
El catedrático opina "que se pone el carro delante de los bueyes, subrayando los riesgos antes de saber en qué consiste la utilización de la inteligencia artificial, sobre todo en el ámbito público". "El resultado", ha añadido, "es la desconfianza y la acumulación de normas".
Alejandro Huergo, durante su discurso. Foto: Nacho Vela.
"Se pueden aislar algunos supuestos en los que cabe la utilización legítima de la inteligencia artificial en el ámbito público", ha defendido el profesor de la Universidad de Oviedo.
Por otra parte, Huergo ha explicado que, generalmente, cuando se regula en el reglamento europeo la inteligencia artificial "lo que se intenta es evitar que no cometa errores, pero no nos dice para qué se puede realizar y no libra de responsabilidad a quién decide utilizarla".
Juan Cofiño recibió en su despacho a los dos conferenciantes y a Leonardo Álvarez, coordinador de Espacio Fundamentos. Foto: Nacho Vela
La regulación de la inteligencia artificial, según Huergo, "no debe tener la misión de impedir la innovación ni matar la iniciativa empresarial en un sector con futuro en el que Europa juega en desventaja". Además, ha señalado, "no se debe llevar a la Administración a conformarse con la situación actual porque existe la tentación de considerar que cualquier riesgo potencial que se derive de la inteligencia artificial es más grave que los daños ciertos que ya existen actualmente, como la demora administrativa".
"La IA es un gran instrumento del que no podemos prescindir y, a la vez, un objeto que retrata los sesgos de todos los que nos pronunciamos sobre ella", ha finalizado.